La inteligencia artificial ya no sólo es cosa de las películas de ciencia-ficción. Las ensoñaciones de directores como Steven Spilberg son hoy una realidad que viene de la mano de empresas como Iactive, una spin-off de la Universidad de Granada (UGR) que nació en 2006 y que hoy cuenta con su propio hueco en Silicon Valley.
Imaginemos un escenario concreto. Un brutal incendio se extiende por un monte andaluz sin control. La administración debe responder de un modo rápido y eficaz para frenar su avance. Son muchos los factores que intervienen en una decisión de ese calibre, hay que movilizar muchos recursos, tener en cuenta factores meteorológicos o valorar las condiciones del entorno donde se está produciendo el fuego. «La tecnología de Iactive pone en marcha un sistema que permite realizar todos los cálculos necesarios, contando con todos los factores y propone un plan de extinción en menos de diez segundos», explica Francisco Palao, uno de los socios fundadores y CEO de la compañía.
«Esta tecnología integrada en cualquier software permite tomar decisiones complejas en un espacio breve de tiempo», prosigue Palao. Para ello, los cinco socios de la empresa, dos profesores de la UGR, Luis Castillo y Juan Fernández, y tres investigadores de la misma, el propio Palao, Oscar García y Tomás Garzón, dedicaron años a bucear en esta área del conocimiento.
«Decidimos montar la empresa con apenas 10.000 euros de capital inicial, aunque al principio nos centramos en un modelo de negocio orientado a desarrollar sistemas inteligentes personalizados a clientes finales», profundiza Francisco Palao. Una actividad en la que se enfocaron los dos primeros años de vida de la firma y que tuvo entre sus clientes a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta para la prevención de incendios, aunque también desarrolló sistemas para otro tipo de aplicaciones en campos como el sanitario, ayudando a definir el tratamiento más personalizado para el paciente o dando las claves para formular una segunda opinión médica, una tecnología que se está utilizando en EE.UU.
Sin embargo, esta línea de negocio se quedaba corta para las pretensiones de estos jóvenes empresarios y en 2009 realizaron una primera ronda de financiación con el objetivo de lograr fondos para desarrollar su propia tecnología y ofrecerla al mercado como un producto acabado.
Tras un año colaborando con varias compañías, Iactive dio el salto definitivo para su desarrollo con su presencia en Silicon Valley. «Fue una gran oportunidad. Ellos están formando a los líderes del futuro. En el verano de 2010, Silicon Valley ofrecía un curso y yo fui elegido, junto a otras 79 personas de 37 países, para su programa de entre 4.500 aspirantes», apunta el CEO de la firma granadina. «Es un entorno muy competitivo y duro, pero te recompensa si trabajas bien», abunda.
Su presencia en el centro neurálgico del sector tecnológico, en el sur de la Bahía de San Francisco, supuso para Iactive comenzar a jugar en otra liga. «Nos abrió muchas puertas e hicimos contactos muy importantes para desarrollar nuestra línea de negocio enfocada a ofrecer soluciones específicas para sectores concretos», sigue Francisco Palao. Una de estas soluciones se llama Nativoo.com, un portal que ofrece el mejor plan de viaje según los gustos, presupuestos, visitas previas y perfil del usuario. «Este proyecto comenzó a funcionar muy bien y nos permitió establecernos con otras empresas en otros puntos del mapa, como Río de Janeiro», asevera el director general de la compañía.
No obstante, y pese al éxito en este campo, Iactive se embarcó en una nueva aventura mediante el desarrollo de Lean Monitor, una plataforma software que ayuda a las empresas a innovar en su área de trabajo de una manera rápida y minimizando riesgos. La aplicación de la inteligencia artificial en este ámbito ha permitido a la compañía prestar servicios a grandes empresas como Repsol o HP, o a entidades académicas como Singularity University de Silicon Valley, el Instituto Tecnológico de Monterrey (México), la Universidad de Sevilla o la de Granada.
Muchas empresas no tienen capacidad para dedicar sus recursos al campo de la innovación, explica Francisco Palao, que asegura que su empresa ofrece asesoramiento en este sentido. «Nos estamos convirtiendo en una compañía enfocada a la innovación. De hecho, somos la tercera empresa española que cuenta con las Google Glass», uno de los hitos tecnológicos del momento, avanza.
 
						 
					