«En el caso de Lorenzo Morillas tenemos que remontarnos veinte años atrás, los mismos que tiene esta universidad en la que estamos, porque él era rector del alma mater de la Universidad de Granada, en cuyo seno nació esta joven, que, hoy, conocemos como Universidad de Almería. Su intervención fue decisiva y trascendental». Son palabras que ayer pronunció el rector de la UAL, Pedro Molina, en el discurso de bienvenida al que ayer fue nombrado Doctor Honoris Causa de la Universidad por su importancia en la fundación del centro almeriense y la relevancia que ostenta en este proceso de emancipación. Lorenzo Morillas, Catedrático de Derecho Penal y exrector de la Universidad de Granada, sigue manteniendo una relación constante con el centro almeriense y sigue participando como docente en numerosos cursos de especialización, programas de doctorado o títulos de máster y experto impartidos en la institución almeriense.
Fue un acto solemne, el primero de la celebración del vigésimo aniversario de la UAL, en el que Pedro Molina le impuso el birrete laureado, «antiquísimo y venerado distintivo de tan grandes, tan ilustres y tan excelsos maestros en el Reino de España». De la misma forma, también le fue entregado el Libro de la Ciencia, que en la antigüedad se entregaba como emblema del privilegio de firmar y sellar los dictámenes, consultas y censuras de su ciencia y religión.
Morillas recordaba en su discurso de investidura cuáles fueron los pasos dados para que la UAL obtenga el reconocimiento actual: «En septiembre de 1993 se creó por Ley del Parlamento Andaluz la Universidad de Almería. Por aquel entonces yo era Rector de la de Granada, en la que hasta esa fecha estaba integrados los estudios universitarios de Almería. Contaba en mi equipo de gobierno, un verdadero lujo, con Pedro Molina como vicerrector de campus, José Guerrero como permanente apoyo y otros ilustres universitarios almerienses que también colaboraron antes en la gestión de la UGR, después en la exquisita y ejemplar transición que supuso la autonomía universitaria almeriense».
Pronunció la Laudatio del Doctorando José Eduardo Sáinz-Cantero, Catedrático de Derecho Penal de la UAL , quien destacó su relación con Lorenzo Morillas , a quien consideró como «maestro y amigo». Confesó que conoció al profesor Morillas cuando era solo «un niño recién llegado a Granada», cuando él fue a buscarlo a la puerta del colegio de los Hermanos Maristas y le acompañó, por primera vez, a la Facultad de Derecho. «Así comenzó nuestra relación», apostilló mientras destacaba las distintas cualidades por las que se le estaba invistiendo como Doctor Honoris Causa. «No sé que es más significativo, si su indudable dimensión de jurista comprometido, de penalista prolífico y de inagotable inquietud o de universitario a tiempo completo por vocación, devoción y ejercicio. Las líneas de especialización de este Catedrático de Derecho Penal son el Derecho penal, la Criminología y el Derecho Penitenciario y sus investigaciones han estado centradas en delitos urbanísticos y corrupción política, delitos relativos a los consumidores, penas y alternativas, Derecho penal y deporte, Teoría jurídica del delito, Derecho penal de menores e igualdad y violencia de género.