– Convertir basura en alimentos, nuevo reto en nutrición.
la industria se plantea el aprovechamiento de los desechos y la creación de productos funcionales.
El aprovechamiento de lo que hasta ahora se consideraba desechos dentro de la industria agroalimentaria y la creación de alimentos funcionales que respondan a las nuevas demandas de los consumidores son los principales retos que afronta el sector ante usuarios que buscan una nutrición sana y equilibrada.
Así lo explicó José María Fernández, gerente de Innofood I+D+i, empresa ubicada en el Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud de Granada, que ofrece proyectos de investigación a las compañías de este sector para sacar el máximo rendimiento a sus residuos y renovarse ante las exigencias del mercado.
Las tendencias alimenticias actuales se orientan hacia alimentos que cubran todas las necesidades con aportes de Omega 3 y 6, fibra o antioxidantes, o bien que ayuden a combatir problemas como el colesterol o a mantener la línea con pocas calorías.
De esta demanda ha surgido la reutilización de los residuos vegetales que generan estas compañías, rico en muchos compuestos y que, aunque antes se eliminaban o se empleaban en la alimentación animal, ahora se purifican hasta obtener subproductos como la fibra, que luego se utiliza en panadería, bollería o productos cárnicos como aporte extraordinario que ayuda a la regulación intestinal.
Los investigadores de Innofood trabajan actualmente, con la financiación de la Junta de Andalucía, en la obtención de fibra a partir de cortezas y pieles de fruta usadas para zumos o conservas, un aprovechamiento que, según el gerente de la compañía, genera ingresos para la empresa agroalimentaria y además supone una solución medioambiental.