Inicio / Historico

Adiós a la rebotica

– Adiós a la rebotica.

La farmacia Gastelurrutia de Altza apuesta firmemente por la Atención Farmacéutica y revoluciona el modelo de oficina habitual de farmacia que hasta ahora conocíamos. La nueva farmacia de Altza, inaugurada el 24 de abril, presenta dos principales novedades para ello: no tiene rebotica, se ha sustituido por un almacén inteligente, que ordena los pedidos y los sirve en bandeja al boticario, y sí tiene despacho donde poder explicar a los clientes los tratamiento delicados o asesorarles de cómo se administra un determinado medicamento, dentro de una cierta intimidad, hasta ahora imposible desde el mostrador.

El boticario, Miguel Ángel Gastelurrutia, es un convencido experto en Atención Farmacéutica que considera que éste es el único camino para intentar cambiar la tendencia actual que dan las cifras, con un 30% de pacientes que acuden a urgencias como consecuencia de un resultado negativo asociado a la medicación, tal y como revelan las conclusiones de un reciente estudio realizado por la profesora Baena de la Universidad de Granada y, según el cual, se revela asimismo que el 75% de los casos se podían haber prevenido mediante la Atención Farmacéutica. Los farmacéuticos están especialmente preparados para aportar una contribución importante a la resolución del problema de la morbilidad y mortalidad relacionadas con la medicación, que afecta de manera importante a la salud pública y que motivan un alto coste.

El robot

Para implantar este sistema de Atención Farmacéutica en su botica, Gastelurrutia ha contado con un elemento esencial: dispone del primer almacén automatizado inteligente en una botica vasca, lo que en su opinión revertirá en más tiempo para poder atender a los clientes, objetivo principal de la inversión –sólo el almacén automatizado más de 120.000€-, ya que como experto en Atención Farmacéutica, Gastelurrutia persigue con esta iniciativa poder dedicar una atención personalizada y un seguimiento de la medicación de sus clientes, a fin de intentar paliar las cifras actuales de resultados negativos asociados a la medicación.

Con este nuevo sistema, el robot de la máquina ordena todos los medicamentos, si hay varios de la misma marca elige el que caduca antes, se gana en espacio y, lo más importante de todo, el tiempo que antes se dedicaba a buscar los medicamentos en la rebotica ahora se puede invertir en hablar con los clientes y asesorarles sobre el tratamiento que les ha indicado su médico.

La farmacia Gastelurrutia de Altza recibe cada día más de 100 unidades de medicamentos, tres veces al día, de las distribuidoras farmacéuticas. Ordenar los productos les requería una hora por cada entrega. Ahora, el ordenador las ordena en pocos minutos. Además, este almacén inteligente no se equivoca nunca. Y si falta un envase, el robot lo notifica, por lo que es imposible que se descuadre un stock.
Descargar