CIENCIAS SOCIALES, ECONÓMICAS Y JURÍDICAS
29 de Noviembre de 2005
PSICÓLOGOS GRANADINOS SOSTIENEN QUE LA SUPERDOTACIÓN INFANTIL SE BASA EN LA CAPACIDAD DE APRENDIZAJE, MÁS QUE EN LA INTELIGENCIA
El grupo de investigación Análisis experimental y aplicado del comportamiento, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada, ha detectado que el factor que distingue a los niños superdotados de los demás se relaciona con su capacidad de adquirir conocimientos en cualquier contexto. Esta conclusión supera las teorías clásicas que basan la superdotación exclusivamente en el cociente intelectual.
Carolina Moya
¿Qué distingue a un niño superdotado de otro que no lo es? Hasta ahora, a los chavales mejor dotados intelectualmente se les detectaba mediante complicados tests que evalúan su capacidad intelectual. Sin embargo, el grupo de investigación Análisis experimental y aplicado del comportamiento, de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada, sostiene que el factor que distingue a los niños superdotados de los demás se relaciona con su capacidad de adquirir conocimientos en cualquier contexto. Esta conclusión supera las teorías clásicas que basan la superdotación exclusivamente en el cociente intelectual.
Los expertos granadinos aseveran que el niño superdotado se diferencia de sus compañeros no tanto por su nivel de inteligencia, sino por su capacidad de aprender muchas cosas y resolver problemas mediante respuestas novedosas o por su facilidad para concentrarse en la realización de una tarea.
Un grupo de escolares atiende durante una clase
Los estudios tradicionales, al limitar el concepto de superdotación a la obtención de altas puntuaciones en pruebas de inteligencia, confunden a veces los niños superdotados con aquellos enriquecidos ambientalmente, es decir, aquellos a los que se llama “niños despiertos”, muy estimulados por sus padres, puesto que los tests tradicionales definen sólo el nivel de ejecución actual, que puede estar determinado por condicionantes como el entrenamiento.
La profesora responsable de la investigación, María Dolores Calero, y su equipo, han establecido una serie de pruebas psicológicas para establecer los factores que distinguen a los niños superdotados. Los científicos han determinado que la flexibilidad, la autorregulación, la capacidad de aprendizaje y la madurez personal se convierten en las características definitorias de los niños con superdotación.
La flexibilidad está relacionada con la adaptación a cambios inesperados, dando respuestas distintas a situaciones cotidianas. En el caso de la autorregulación, ésta consiste en el control del propio proceso de aprendizaje, es decir, niños superdotados modulan su manera de enfrentarse a una tarea y no se dejan llevar por la distracción.
Para obtener estos resultados, los psicólogos evaluaron primero a los hijos de la Asociación de Padres de niños con superdotación de Granada y Jaén. Más tarde, los científicos ampliaron su muestra con los chavales procedentes de los servicios de atención psicológica de la facultad granadina y de centros educativos públicos, a partir de un convenio firmado con la delegación de Educación de la Junta de Andalucía. Posteriormente han evaluado a grupos de niños con inteligencia normal.
Los expertos utilizan pruebas de potencial de aprendizaje, métodos de flexibilidad cognitiva, medidas de memoria de trabajo, así como técnicas para calcular la autorregulación y el control motivacional, además de tests de inteligencia y rendimiento tradicionales.
Sin exclusión
Con la experiencia obtenida de esta investigación, la profesora Calero aboga por un programa de enriquecimiento escolar para los niños superdotados, pero sin separarlos de sus compañeros y partiendo del currículo de contenidos del curso que les corresponda. “No consiste en marginar a estos niños, sino de que cuenten con actividades complementarias que vayan aumentando la complejidad conforme a sus demandas”, explica la psicóloga. El equipo de investigadores trabaja ya en guías didácticas para chavales con superdotación.
Asimismo, el Servicio de Atención Psicológica (SAP) de la facultad granadina cuenta con un curso de detección y asesoramiento de niños con posible superdotación intelectual, dirigido a niños de entre 3 y 5 años de edad. La iniciativa va dirigida a hijos de profesores, así como personal de administración y servicios de la Universidad.
Más información:
María Dolores Calero
Tlf: 958 24 37 54
mcalero@ugr.es