Un programa de ordenador, ideado en la Universidad de Granada, simula prácticas de laboratorio de Química-Física
El programa, con el que ya se han realizado prácticas virtuales con alumnos
voluntarios de la asignatura de Física Aplicada y Fisicoquímica del primer curso de licenciatura de Farmacia, está coordinado por el profesor Alberto Hernández Gaínza, y forma parte de un proyecto de innovación docente probado por el Vicerrectorado de Planificación, Calidad y Evaluación docente de la Universidad de Granada.
Con el objetivo de realizar prácticas de laboratorio virtuales con
programas de ordenador, que simula las realizadas en un laboratorio
convencional, se ideó el proyecto de innovación docente
Docencia-evaluación de Química Física usando nuevas tecnologías,
coordinado por el profesor Alberto Hernández Gaínza. En el proyecto,
aprobado por el Vicerrectorado de Planificación, Calidad y Evaluación
Docente, participan los también profesores del Dpto. de Química Física,
José María Álvarez Pez y Eva María Talavera Rodríguez.
Con estas prácticas de laboratorio virtuales con programas de ordenador
se prepara a los alumnos para las prácticas reales –según el responsable del proyecto de innovación docente Hernández Gaínza– y les permite realizar otras imposibles de hacer, por limitaciones materiales o de temporales.
Asimismo, con este proyecto se pretende introducir al alumno en el
manejo de este tipo de programas como método didáctico, comprobar su
potencial como método de enseñanza, simular experiencias de laboratorio
con páginas web, manejar paquetes estadísticos para resolución de
problemas gráficos, etc.
Según los responsables del proyecto la experiencia docente en la
asignatura de Química Física enseña que su aprendizaje resulta difícil
usando los métodos didácticos tradicionales.
El número de prácticas, gracias al nuevo método, superaría las doscientas, y el número de horas que requeriría el alumno para llevarlas a cabo superaría, así, las 500. Los estudiantes realizan normalmente de cinco a ocho prácticas de la asignatura como complemento didáctico, lo cual resulta insuficiente y, a demás, dichas prácticas se realizan en el momento en que el laboratorio está disponible, no cuando el alumno necesita el recurso didáctico como una ayuda en su aprendizaje. La realización y discusión de las prácticas es la mejor forma de aprender la asignatura.