Representantes de una veintena de universidades españolas han debatido hoy en Granada sobre la repercusión que la reforma laboral puede tener sobre el empleo universitario y han mostrado su preocupación por que esta pudiera conllevar un incremento de la precariedad y la temporalidad.
Así lo ha explicado hoy a los periodistas la vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Granada, Inmaculada Marrero, quien ha inaugurado en el Rectorado la Reunión Sectorial de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), que han tratado sobre «Orientación laboral y competencias profesionales».
Según Marrero, algunos «temen» que, con la reforma laboral, los servicios universitarios de empleo sean «una especie de empresa de trabajo temporal», a lo que, ha añadido, van a «resistirse con toda fuerza».
«Queremos dar un servicio de calidad, mejorar el que tenemos y sobre todo no contribuir a la precariedad en el empleo, sino todo lo contrario», ha declarado la vicerrectora, que espera que la reunión plantee propuestas que sirvan para reforzar estas prestaciones.
La pretensión es que las universidades mejoren los servicios de intermediación laboral para que los estudiantes puedan así acceder al mercado laboral con puestos de trabajo adecuados a la calificación que obtienen durante sus estudios.
Por su parte, Rafael Peregrín, director técnico del Centro de Promoción de Empleo y Prácticas del vicerrectorado de Estudiantes de la Universidad de Granada, ha puesto de manifiesto en qué medida la reforma laboral va a condicionar los procesos de información que estas instituciones ofrecen.
Según ha explicado, la reforma afectará especialmente a las agencias privadas de colocación, una figura que ha venido existiendo desde 1995, y a las que en la actualidad se da una nueva visión.
«Puede que el peso de esta actividad recaiga casi exclusivamente en las empresas de trabajo temporal y eso es una de las cosas que nos está empezando a preocupar», ha dicho Peregrín, quien espera que las universidades se adapten a las «nuevas reglas del juego» para dar una respuesta «rápida y efectiva» a las necesidades de sus usuarios.
Otro de los aspectos que más preocupa, según ha explicado, es el desfase que puede existir entre la normativa laboral, la educativa y las demandas del Espacio Europeo de Educación Superior, lo que no siempre se corresponde con lo que desarrollan el Ministerio de Trabajo y las distintas consejerías autonómicas.
Los representantes de la veintena de universidades españolas reunidas en el Área de trabajo de Empleo de la Red Universitaria de Asuntos Estudiantiles (RUNAE) han estudiado además el informe sobre el estado del Marco Europeo de las Cualificaciones en España.
Además han debatido sobre la situación de la orientación en los Servicios Universitarios de Empleo y sus nuevas necesidades.
La RUNAE es la comisión sectorial de la CRUE encargada de promover entre las universidades la coordinación de las actividades y propuestas relativas al ámbito estudiantil en sus diversas manifestaciones.