Inaugurada en la ETSICCP la exposición dedicada al padre de la ingeniería moderna
Agustín de Betancourt dejó en su paso por Granada la semilla de una ciudad acorde a los retos actuales. Su huella se ha puesto de manifiesto en la inauguración de la exposición itinerante ‘Betancourt (1758-1824) y los inicios de la ingeniería moderna en Europa’ en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos. Granada tiene el privilegio de ser la primera sede en España.
La alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, ha acompañado en la mesa inaugural a Miguel Ángel Carrillo, presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (CICCP); Áurea Perucho, directora del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX); Mónica López, directora de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Granada; y Montserrat Zamorano, vicerrectora de Infraestructuras y Movilidad de la Universidad de Granada.
Durante su intervención, tras hacer un pequeño recorrido por la exposición, Carazo ha destacado la contribución de los ICCPs en “la transformación de la ciudad y su aportación para hacerla crecer”. Ha agradecido la ayuda desde el inicio en proyectos claves para Granada como la integración del AVE o el plan de movilidad sostenible, su “importante labor en la toma de decisiones en los proyectos en los que tenemos que avanzar”. La alcaldesa ha recordado que es un día para reconocer la profesión y sumarla al desarrollo de la ciudad y ha agradecido el haber traído a Granada esta emblemática exposición que suma un paso al deseo de convertir Granada en la capital de la cultura en 2031.
En representación del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, su presidente ha puesto el acento en la relación de Betancourt con la ciudad de Granada y sus infraestructuras: “Estamos muy orgullosos de que esta ciudad, que es magnífica por su historia, su belleza y su conexión con Betancourt, sea la primera en la que presentamos esta muestra itinerante”. Fue en Granada, ha recordado, donde Betancourt “demostró ser pionero de la sostenibilidad ambiental” con el encargo en 1803 del político Manuel Godoy para regular las aguas del rio Genil para evitar inundaciones. En el informe técnico que redactó recomendaba plantar franjas de arbolado y construir el sifón de Jotayar eliminando los azudes que obstaculizaban el flujo de las aguas.
“La obra de este ingeniero visionario”, ha resaltado Montserrat Zamorano, debe invitarnos a reflexionar sobre cómo afrontar los desafíos contemporáneos de la ingeniería civil, en particular, en el contexto del cambio climático y el desarrollo sostenible. “Es un ejemplo de cómo debemos enfrentarnos a estos desafíos actuales y hacer de ellos una oportunidad”, ha incidido antes de animar a que “el proyecto de este gran ingeniero de renaturalizar el entorno de los ríos de la vega se pueda materializar en proyectos tan ambiciosos como el del Anillo Verde y otros que desde el Ayuntamiento y asociaciones como la Huella Verde se están impulsando y que son tan importantes para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de Granada y su provincia”.
Presidente del CICCP y vicerrectora han coincidido en los retos que afronta la sociedad actual en materia de gestión del agua, señalando que “el enfoque innovador y multifacético” de Betancourt “debe servirnos para inspirar soluciones centradas en la sostenibilidad y la resiliencia ante un planeta en emergencia climática”.
Áurea Perucho ha reivindicado el “importante papel de la ingeniería civil en el progreso de una sociedad y en la mejora de su calidad de vida, mucho más allá de la realidad física de las infraestructuras y los servicios satisfechos gracias a estas”. Ha subrayado que la figura de Agustín de Betancourt, “a través de su obra en España y especialmente en Rusia, es un claro ejemplo de vertebración social y construcción de estructuras organizativas que exceden, en mucho, la faceta meramente inherente a la realidad física”.
Por su parte, Mónica López ha remarcado que “la exposición está compuesta por una extraordinaria colección de documentos, maquetas y planos, cedidos por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, así como por el CEDEX. Cada pieza refleja el ingenio y la visión de Betancourt, quien no solo construyó puentes, sino también el futuro de la ingeniería tal y como la conocemos hoy”. Ha añadido que “el carácter itinerante de esta exposición es una oportunidad inigualable para que más personas, de diferentes ciudades, puedan acceder a este legado. Cuando recorran la exposición, les invito a reflexionar sobre la importancia de la ingeniería como motor de progreso”.
La figura de Ignacio González Tascón
A continuación, se ha celebrado la mesa que llevaba por título ‘Palabras en memoria de D. Ignacio González Tascón’. En la misma, presentada por el decano de la Demarcación de
Andalucía, Ceuta y Melilla del CICCP, Juan Manuel Medina, han participado Ángel González, director de exposiciones itinerantes del Centro de Estudios Históricos de obras Públicas y Urbanismo (CEHOPU) del CEDEX; Isabel Bestué, profesora asociada de la ETSICCP de Granada; y Pedro Ferrer, ex profesor de la Escuela.
Ángel González ha dedicado unas palabras al recuerdo de González Tascón, gerente del CEHOPU entre 1992 y 1994, de quien ha asegurado que “fue un referente en la investigación de la historia de la tecnología y la ingeniería en España, dotado de una curiosidad intelectual inagotable”. Ha recordado que “desde el CEHOPU impulsó la divulgación del conocimiento histórico en este campo, atrayendo la colaboración de investigadores y especialistas, todos ellos colaboradores, con los que era generoso y exigente, convirtiéndolos en amigos”.
Isabel Bestué ha descrito a este ilustre ingeniero en su faceta de profesor de la Escuela de Granada, en especial por su implicación en la formación integral de los alumnos. “La figura de Ignacio como investigador no empequeñece su vertiente como profesor, a la que se dedicó con ilusión desde su cátedra de la Escuela de Ingenieros de Caminos de Granada. Predicó con el ejemplo en su labor como profesor, siendo capaz de imprimir en sus alumnos el entusiasmo y la visión crítica sobre muy diversos aspectos de la tecnología, pero también del ámbito social, cultural y filosófico”, ha recalcado la profesora.
Por su lado, Pedro Ferrer ha hecho referencia a la “enorme influencia de González Tascón en la Escuela, especialmente con sus alumnos, con los que siempre tuvo una sintonía especial”. Ha definido al protagonista como un “ilustre compañero de profesión y de docencia, excelente ingeniero, excepcional docente e investigador y, sobre todo, una magnífica persona”.
Tiempo, vida y obra de Betancourt
La jornada ha proseguido con la mesa redonda ‘Agustín de Betancourt: su tiempo, su vida y su obra’, con Daniel Crespo, investigador de la Fundación Juanelo Turriano y profesor de la Universidad Complutense de Madrid; Alfonso Luján (CEHOPU) y Rita Ruiz, profesora titular de la ETSI de Caminos de la Universidad de Castilla-La Mancha. Ha moderado Fernando Ruiz, presidente de la Comisión de Cultura del CICCP.
Daniel Crespo ha incidido en el Betancourt ‘ingeniero cosmopolita’, que nació en las Islas Canarias, falleció en Rusia y vivió en Madrid, París y Londres, en todos con una fructífera relación con ingenieros, artesanos, científicos, académicos, literatos y políticos. Ha observado que “gracias a su labor institucional, técnica y científica, Betancourt pudo difundir y crear redes europeas donde puso en común las nuevas ideas que sobre la ingeniería de caminos se estaban debatiendo en Europa”.
Rita Ruiz se ha centrado en “la génesis y evolución de las dos creaciones que más fama dieron a Don Agustín de Betancourt en nuestro país: la Inspección de Caminos, fundada en 1799 y célula germinal del cuerpo de ingenieros de caminos, y su Escuela que, concebida
según el patrón de la Ponts et Chausées de París, abrió sus puertas en el palacio del Buen Retiro, el 19 de noviembre de 1802”.
Clausura
El evento ha sido clausurado por Antonio Ayllón, delegado territorial de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda de la Junta de Andalucía en Granada, quien ha coincidió con los anteriores ponentes en el papel innovador de la mirada de Betancourt, que con sus obras de ingeniería fue un pionero a la hora de afrontar proyectos urbanísticos y en pro de la sostenibilidad ambiental. “Sin la maestría y el saber de los ingenieros, sin su capacidad para sacar adelante proyectos y obras, ni Andalucía, ni España, ni el mundo en general sería hoy lo que es”. Ayllón ha incidido en que el Gobierno andaluz es muy consciente de ello y cuenta con los ICCPs para sacar adelante “los muchos proyectos en marcha para hacer de Andalucía una tierra más próspera, con más oportunidades”. Para ello, ha avanzado “un plan ambicioso para dotarnos de infraestructuras destinadas a generar nuevas oportunidades”. Ha traído a la mesa el Banco de Proyectos y ha apuntado que, “si conseguimos para Andalucía la financiación adecuada, nos van a permitir desarrollar actuaciones que mejorarán las comunicaciones y harán progresar las ciudades”.
Tras las palabras del delegado, Alfonso Luján y José Carlos Pacheco, coordinadores de la exposición, condujeron a los asistentes en una visita guiada.
Detalles de la exposición
Agustín de Betancourt es considerado el padre de la profesión tal como se concibe actualmente y uno de los promotores de la creación de la primera Escuela de Ingeniería de Caminos y Canales de España (Madrid, 1802), que representa el alumbramiento de una profesión que ha sido decisiva para el desarrollo económico y social de nuestro país. La muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 31 de octubre, está diseñada por el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), con la colaboración del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (CICCP) y, cuenta con el apoyo de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos (ETSICCP) de Granada y la Fundación Juanelo Turriano. Se trata de una recopilación con un gran valor histórico y documental, que contribuirá a difundir la dimensión universal del ingeniero español y que se enmarca en el bicentenario de su fallecimiento.
La cita reúne un total de 15 maquetas pertenecientes a la Colección del Centro de Estudios Históricos de Obras Públicas y Urbanismo (CEHOPU), repartidas cronológicamente y atendiendo a tres áreas expositivas: Betancourt y la ingeniería civil española en la Europa de la Ilustración, El Real Gabinete de Máquinas y Un hombre de acción en Rusia.
Se trata de un compendio actualizado de la exposición organizada por CEHOPU-CEDEX en el Real Jardín Botánico de Madrid en 1996. Entre las maquetas destacan la del telégrafo óptico y la de los andamios para la elevación de las columnas de la catedral de San Isaac en San Petersburgo. También sobresalen las del molino eólico para elevar agua, martinete para la hinca de pilotes, polea para levantar grandes pesos o construcción de un puente según el sistema de Jean-Rodolphe Perrronet.
Entre otros muchos proyectos, Agustín de Betancourt fue el artífice de la feria de Nizhni Nóvgorod en Rusia, implantó el telégrafo óptico, hizo volar el primer globo aerostático en España y logró la mejora del sistema de navegación interior a través de esclusas. Fue asimismo un pionero en urbanismo y sostenibilidad ambiental, cosmopolita, global, políglota, emprendedor y apasionado de su tierra canaria.